Una manera de plasmar la credibilidad de su empresa, es por medio de su imagen corporativa donde no solamente se ayuda a dar identidad a su negocio, sino que además lo ayuda a diferenciarse de su competencia.

Los beneficios que brinda tener una identidad bien elaborada, pueden ser evidentes cuando sus clientes lo recuerdan como una empresa sólida y consistente.

Cuando un cliente mira su logo, u otro elemento corporativo, este debe ser de su agrado, transmitir confianza y afinidad con los servicios que usted brinda, y debe reflejar su credibilidad empresarial. Al mismo tiempo ha de ser único y distintivo de su competencia.

Sin embargo no siempre se le da la importancia que debe tener el desarrollo de un logo o un manual de imagen corporativa, algunas personas tienen la idea de que la apariencia de su imagen corporativa de su negocio no afecta su credibilidad empresarial, o en ocasiones dejan este trabajo a personas inexpertas, sin pensar en el proceso que se debe tener en cuenta al momento de desarrollar un manual de imagen corporativa. Por ejemplo, en muchos talleres de impresión regalan el diseño por la impresión de las tarjetas, sin hacer ningún tipo de análisis al cliente, cosa que no es una buena práctica dado que al momento de elaborar el logo de una compañía, es bueno hacer una investigación acerca del modelo de negocio del cliente y saber cuál es su público objetivo para poder transmitir el mensaje correcto a través de su imagen corporativa. En este caso se preocupan más por el arte final y aspectos técnicos de impresión, que también son importantes ya que el logo debe verse consistente a través de múltiples plataformas y soportes (papel, sellos, recibos, esteros), pero no debe basarse en solo conceptos técnicos, sino contemplar otros conceptuales.

En el desarrollo de un logo se han de tener en cuenta varios factores, como lo son su concepto, público objetivo y aspectos técnicos de impresión. Una buena práctica, como principio, es partir de una investigación sencilla, en donde por ejemplo su empresa se podría preguntar:

¿Cuáles son los valores de su empresa?, ¿Cuál es su público objetivo?, ¿Cuál es su principal competencia?, ¿Algún patrón o color que lo identifique?

Estas preguntas sólo las tomo como ejemplo de base, ya que dependiendo de la compañía nos podemos extender más; sin embargo, nos ayudarán a tener una idea clara de qué queremos transmitir y con esto ya lo podremos mandar desarrollar a una empresa de diseño gráfico.

Para concluir, el desarrollo de un logo ha de tener un manual de imagen de uso corporativo, donde se consignen los aspectos anteriormente mencionados: el proceso de su elaboración, concepto, público objetivo y los parámetros para las aplicaciones donde será visible, o al menos las mínimas reglas de su uso. Si el proceso de desarrollo de la imagen corporativa de su empresa es tomado a la ligera o desarrollado por personas inexpertas, el resultado será la pérdida de credibilidad empresarial.